La **gestión de equipos basada en indicadores** es un enfoque estratégico que permite a las organizaciones optimizar su rendimiento y alcanzar sus objetivos. Esta metodología se fundamenta en la recopilación y análisis de **datos** clave, que proporcionan información objetiva sobre el desempeño del equipo.
A través de la identificación de **indicadores de rendimiento** (KPIs), los líderes pueden medir la efectividad, la productividad y el compromiso del equipo. Estos indicadores no solo permiten un **seguimiento continuo** de los avances, sino que también facilitan la detección de áreas de mejora.
La implementación de esta gestión promueve una **cultura de responsabilidad**, donde cada miembro es consciente de su contribución al logro de las metas. Además, se fomenta la **transparencia** al establecer expectativas claras y medibles.
En resumen, la gestión de equipos basada en indicadores se traduce en una **toma de decisiones informada**, impulsando el éxito organizacional de manera sostenible y eficiente.